¡¡Voz Femenina!!

La voz es algo meramente relacional, nos dice Carol Gilligan, es aquello que permite que interactuemos con los otros. Con nuestra voz, con nuestra palabra, constituimos el mundo, nos ubicamos en él y nos constituimos a nosotr@s mism@s. Nuestra identidad está formada por la interacción con otras voces diferentes a una y porque esas otras voces nos reconozcan. Habría que preguntarnos ¿Qué voces son consideradas como portadoras de verdad? ¿Qué ocurre en una sociedad que sólo escucha una voz? ¿Qué ocurre con el individuo al que se le es negado emitir su propia voz, su propia opinión?

Encontramos entonces que en la formación de nuestra propia identidad juega un rol muy importante no sólo el reconocimiento de nuestra voz por parte de otras voces diferentes a ella, sino el reconocimiento de parte de nosotras mismas de nuestra propia voz. Este es un punto muy importante que debemos tener en cuenta. Si yo guardo mi opinión, si yo silencio mis preguntas, es porque siento que existe una voz que lleva LA VERDAD y que no es precisamente la mía. Esto nos lleva a una crisis, entre la voz femenina y la “voz oficial”. Cómo se forme nuestra identidad a partir de ésto marcará todos los campos de nuestra acción: familiar,social, político, económico, entre otros.